El juego de la seducción

La vida es un juego de seducción, ¿pero bailarle sensualmente a una mujer, de frente, viéndola a los ojos? Eso sí que fue revelador.

por Bianca Pescador

Yo sé que la vida es un juego de seducción.

Si lo piensas un minuto, nos seducimos unos a otros todo el tiempo, ¡hasta entre amigas!

Para que una amiga acepte comer o ir a tomar un café con nosotras, debemos ser lo suficientemente seductoras a fin de que prefiera nuestra compañía y conversación en lugar de, digamos, ver una serie de Netflix, jugar con su perro o simplemente dormir.

Lo que nunca había hecho, y mira que me gusta probar cosas nuevas, es bailarle a una mujer. Y no hablo de una coreografía montada, ¡no! Hablo de SENTIRME, inspirarme, dejarme llevar por la música y moverme intuitivamente, instintivamente.

SIENTE QUÉ SE SIENTE

Este ejercicio fue uno de los muchos que hicimos este fin de semana durante el taller presencial de Danza Tántrica que, por definición de su creadora, es una herramienta de autoconocimiento y movimiento consciente para despertar la sensualidad natural, activar la fuerza vital y expresar la energía femenina en total libertad.

Este método fue creado por Tatiana Zondowicz, una mujer hermosa, atractiva y sensual de nacimiento, y consiste en contactar con esa sensualidad femenina que muchas veces hemos reprimido a causa de tantos tabúes, críticas, miradas y juicios.

¿Y es que cuántas veces hemos dejado de movernos, hablar o vestirnos de cierta manera porque “van a decir” que somos unas zorras, p%3@s, fáciles o urgidas? Bueno, el movimiento que promueve Tatiana es justamente para reconectar con nosotras y decir: “Aunque a algunos les moleste, yo le vengo a hacer el amor a la vida”.

AMANTES DEL PLACER

¿Qué significa “hacerle el amor a la vida”? DISFRUTAR. SENTIR. DARNOS PLACER. ¿Cómo? A través de distintas actividades y estímulos. A lo mejor a ti te viene bien la conexión con las plantas, a mí hacer ejercicio, a Ana leer y escribir en su Bullet Journal, a Cristina meditar, a Alejandra tomarse un Cosmopolitan en su terraza, a Laura darse un masaje tántrico…

Cada mujer tiene su propia válvula de escape, y es importante conocerla y acudir a ella cuando lo necesitemos, es decir, no esperar a explotar para darnos lo que Tatiana llama “una pausa sagrada”.

Al final del día, tenemos que reconocer que las mujeres somos cíclicas. Y si bien no es una excusa para no ser disciplinadas, sí es una razón para tener diferentes herramientas a lo largo del mes. ¿O es que todo se arregla con un martillo? ¡No! La caja usualmente también contiene un desarmador, pinzas, tijeras, cinta métrica. You get the point!

I FEEL LIKE A WOMAN

En conclusión, danza tántrica es la combinación de baile, consciencia y sensualidad, pero no desde este punto de vista donde “te vengo a hacer un show para que me hagas caso”, sino desde la perspectiva que va más allá: en lugar de perseguir, ATRAIGO. Me convierto en un imán de todo lo que sí quiero, sí deseo y sí busco. Créeme, ¡¡¡hace toda la diferencia!!!

Convertirnos en mujeres magnéticas que atraigan abundancia, prosperidad y amor es posible si nos dedicamos a autoseducirnos primero, antes de querer seducir al otro.

Por eso el ejercicio del baile hacia otra mujer fue tan enriquecedor: porque nos conectó con esa diosa poderosa que baila, disfruta y goza bajo la energía de la luna y sus hermanas brujas. Creo que lo más poderoso, fuera de movernos tan libremente (como casi nunca tenemos oportunidad), fue la mirada de amor de las demás. 

Ojalá todas nos pudiéramos ver con los ojos de las mujeres que nos quieren, admiran y cuidan. ¡¡¡Nuestra mirada interior sería mucho más compasiva y milagrosa!!! 

Si te interesa conocer más acerca de qué es y cómo puedes integrar la danza tántrica a tu vida, sigue a Tatiana en Instagram como @soymujergrandiosa