Paz interior, ¿cómo recuperarla?

Con motivo del Día Internacional de la Paz, platicamos con la terapeuta, numeróloga y coach en Creación Deliberada, Pau Oropeza, quien nos compartió diversas técnicas para volver a nuestro centro después de sentir miedo, preocupación o ansiedad, y conectar nuevamente, rapidito y sin tanto rollo con nuestra paz interior.

por Bianca Pescador

En 1981, la ONU eligió el 21 de septiembre como el Día Internacional de la Paz y aunque se refiere más bien al fortalecimiento de los ideales de la paz a través de la observación de la no violencia y el alto al fuego, nosotras fuimos un paso más allá.

¿Cómo que un paso más allá, te preguntarás? Bueno, piensa por un momento en aquella frase pronunciada por la súper sabia Elle Woods: “Las personas felices no matan gente”. ¡Y es verdad! Piensa en ti cuando estás de buen humor, ¿cómo tratas a los demás? Ahora piensa en cómo es tu actitud cuando te levantas con el pie izquierdo y sientes que todo el mundo está en tu contra.

Así que en lugar de hablar de la paz mundial, tema que por supuesto es interesante, para este blog decidimos hablar acerca de donde comienza todo: EN NUESTRO INTERIOR.

Para ahondar en el tema de la paz interior, elegimos a Pau Oropeza, terapeuta, numeróloga y coach en Creación Deliberada. “Llevo seis años dedicándome a la sanación a través del Ser, lo que quiere decir que trabajo con la parte no física de la persona a fin de ayudarla a que su mente trabaje a favor y no en contra de ella con el objetivo de vivir una vida más auténtica, plena y feliz”, dice Pau.

3 pasos para volver a tu centro

La forma más fácil de regresar a sentir paz, armonía, amor y felicidad es, primero, aceptar que no estamos así en ese momento. “Lo peor que podemos hacer para volver a estar en paz es sentirnos mal porque no lo estamos, es decir, resistir la emoción que me aleja de la paz, sea cual sea. Entonces, basándome en los libros El Poder del Ahora de Eckhart Tolle y Deja de ser tú de Joe Dipenza, desarrollé una técnica que he llamado Proceso de Transmutación”.

¿Qué es la transmutación? Viajar del miedo al amor. En este mundo, todo es energía y todo es polar, así que el miedo y el amor son la misma energía, sólo que una está en un extremo y la otra en el otro, una crea situaciones que sí queremos y la otra situaciones que tememos.

Pau Oropeza, terapeuta y numeróloga

“La transmutación es literalmente utilizar ese miedo para transformarlo y crear lo que sí queremos. El paso 1 de este proceso es hacer una pausa para observar qué estoy sintiendo en ese momento. Supongamos que es frustración, entonces acepto y afirmo ‘estoy sintiendo frustración’, es decir, le pongo un nombre a mi emoción; si no sé qué estoy sintiendo cierro los ojos y observo la emoción en una parte del cuerpo para saber cuál es”, explica la terapeuta.

“El paso 2 es observar la emoción tal cual es, puedo incluso ponerle un color, un olor, una forma, un lugar. Importante: no hago este paso para sentirme bien ni para juzgarme, lo hago meramente para observarla. Paso 3: ¿qué sucedió con esa emoción al observarla? Usualmente la emoción negativa desaparece o más bien se transforma en una emoción de mayor claridad o de paz, pero en definitiva en la escala emocional será un estado más positivo. ¿Por qué? Por la conciencia, ‘el que observa es la parte consciente’ y cuando esto pasa, no hay cabida para el ego. Traducción: no hay lugar para el miedo”.

“El paso 4 es contarnos la historia que queremos. Aquí cito a Joe Dispenza, quien nos dice que nosotros somos nuestros pensamientos y emociones, en otras palabras, él asegura que la realidad depende de lo que nosotros nos contamos al respecto y no tanto de lo que verdaderamente sucede, self-talking le llama él. La clave en este paso es no contarnos una mentira con relación al tema que de principio nos quitó la paz, por ejemplo, si fue porque no tengo dinero, no voy a decir ‘soy millonaria”, porque ahora mismo esa situación me va a generar resistencia. Es mejor empezar agradeciendo y bendiciendo lo que sí tengo, lo que sí hago, lo que sí soy y percibo ya como una realidad manifiesta. Utiliza las frases ‘Agradezco’ y ‘Amo’ en las afirmaciones, por ejemplo, amo que me estén entrevistando, agradezco que puedo compartir lo que sé; después de la 10 o 15 puedes empezar a visualizar lo no manifiesto todavía”.

DOS OPCIONES MÁS PARA CONECTAR CON LA PAZ INTERIOR

“Una vez que aceptas dónde estás ahora –en el enojo, la ira, la ansiedad, la frustración– puedes tomar una siesta. Cuando dormimos nuestra alma viaja, conecta con otras entidades y adquiere información; cuando despertamos lo hacemos energéticamente nuevas, en otro lugar, no importa que hayan sido 20 minutos. Lo importante es elegir el nuevo enfoque –de paz– con conciencia”, explica Pau.

“Otra opción es, aceptar dónde estoy, y meterme a bañar. El agua limpia todo y teniendo la intención lo puedes hacer con café o sal de mar; mientras cae el agua, pídele que se lleve la energía o situación que no te está gustando. Se oye muy simple, pero somos muy poderosas, creamos con la intención, así que hazlo con certeza y confianza para que funcione”.

La tercera opción que nos da Pau es la respiración. “Es mi favorita porque es la forma más simple, pero a la mente pareciera que le gusta lo complicado. La técnica es solamente observar la respiración, nada más, inhalar y exhalar para llevar la atención al momento presente. Cuando lo hacemos, no hay forma de no obtener paz, aunque sea por unos segundos”.